Un plan de comunicación externo en un centro educativo (en el siglo XXI)
debería suponer un sistema circular en la Web 2.0 que permitiera a sus
integrantes (padres, alumnos y profesores) crear una comunidad educativa que generara un
flujo de información constante, diálogo y participación.
La necesidad de un plan de comunicación en cualquier centro educativo
creo que debería de responder a los siguientes objetivos:
1.
Mejorar la
comunicación de todos los integrantes de la comunidad educativa en sus
distintos niveles:
-
Alumnos-
alumnos
-
Profesores-profesores
-
Padres-padres
-
Profesores-alumnos
-
Profesores-padres
-
Alumnos-
padres
2.
Transmitir
información de manera clara y precisa sobre el proyecto educativo de centro.
3.
Crear una
comunidad activa donde los
participantes conversen, creen y compartan los contenidos oportunos.
El primero de los objetivos se refiere a un tipo de comunicación más
directa, cara a cara, donde los diferentes sectores pudieran comunicarse
fácilmente. En el segundo objetivo, el término “información” se delimita al uso
tradicional monodireccional de arriba abajo de transmisión de contenidos; sin
embargo, no sólo la directiva se encargaría de decidir sobre qué informar, sino
que las fuentes de información provendrían de la propia comunidad educativa. Por
tanto, la información se generaría de manera colaborativa; es decir, no habría
un único autor, sino que cualquiera podría serlo. Por último, es importante
señalar el sentido comunitario de un plan de tal índole. Un plan de
comunicación no tendría ningún sentido si no hubiera comunicación propiamente
hablando, y para que haya tan interesante actividad es necesario que los
participantes sean activos y no pasivos; entonces seguiríamos hablando de un
modelo de comunicación exclusivamente corporativo. Es imprescindible que sea la
propia comunidad la que genere la comunicación.
¿Cómo encauzaríamos dicho plan?
Ya hemos determinado qué queremos conseguir y cuáles serían los principales
objetivos y también sabemos a quién vamos a dirigir nuestro plan. Ahora, es
importante también tener muy claro qué queremos transmitir y así lo hemos
expresado a través del segundo objetivo. ¿Qué medios usaríamos entonces para
ejecutar este plan?
En primer lugar es importante que tanto alumnos como profesores tengan
claro su propio PLE (entorno personal de aprendizaje), pues eso facilitaría el flujo de información. Aunque de
momento, no expondré nada concreto, sí anticiparé que los medios o canales de comunicación
dependerán de la idea que queramos compartir (acto locutivo) así como de la
intención de los participantes (función ilocutiva), lo cual a su vez presumirá
unas determinadas consecuencias (función perlocutiva del lenguaje). Por eso, en
el plan habrá grupos cerrados y grupos abiertos, temas que requieran de cierta
privacidad y temas que se traten libremente… Las herramientas serán por tanto variadas: blogs, microblogging
como twitter, redes sociales educativas como edmodo o de índole más abierto
como facebook, fórums o la propia web del centro entre otras herramientas sociales.
Permitidme cerrar, que no concluir, esta intervención desde todos los
puntos de vista. Soy alumna, madre y profesora y creo firmemente en las
ventajas que un buen plan de comunicación supondría para cualquier centro
educativo. Como alumna de la escuela oficial de idiomas me hubiera gustado, en
su momento, haber podido disfrutar de una comunicación más fluida con la
organización en todos los niveles (administrativo sobre todo). Como profesora y
tutora, un plan de comunicación de centro ampliaría la visión de padres y
alumnos sobre el sistema educativo, y por muy abstracto que esto suene,
simplemente se traduciría en una ampliación del contexto educativo del
estudiante, pues el aprendizaje no se limitaría al aula ni a las dos, tres o
cuatro horas semanales de la asignatura. De la misma manera, la comunicación de
profesores a padres mejoraría y en este sentido acabo como madre, pues
realmente creo que un seguimiento académico de nuestros hijos en sus edades más
tempranas les garantizará una buena base para llegar a ser aprendices autónomos
e independientes. Y dicho seguimiento solo será posible cuando padres y profesores
miren en la misma dirección y compartan vehículo, o red de carreteras.
Imagen tomada del blog.educalab
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